La lectoescritura es una de las cuestiones educativas que generan más controversia y preguntas entre los educadores y las familias. ¿Cuándo hay que enseñar a leer y a escribir? ¿Cómo se debe hacer? ¿Cuál es el mejor método para lograrlo? ¿Cómo podemos reducir las faltas de ortografía y mejorar el nivel de lectoescritura en España? Todas estas cuestiones son tratadas en esta obra. En ella se mostrará un nuevo enfoque y una nueva concepción de la lectoescritura, la ortografía y la prevención de ambas. Sencillo, práctico y adaptable a los ritmos evolutivos de nuestros futuros lectores.
La manera de adentrarnos en el mundo de las letras puede ser progresiva y suave, o áspera e dificultosa. El enfoque del autor es respetuoso con los ritmos de cada niño o niña pues se basa en los prerrequisitos lectores. Por ejemplo, el enfoque sonoro de la conciencia fonológica, uno de los principales prerrequisitos lectores, no actúa en el lapicero del alumno, sino en las capacidades de análisis de los sonidos y las letras. De hecho, el niño no debe leer ni escribir para "saltar" en esta capacidad humana. Unas pocas experiencias con el lapicero y un buen análisis fonológico bastarán para que la lectura "florezca" como una semilla con la luz y el agua.
Aunque tiene un fuerte componente de trabajo en la escuela, en el aula, también las familias interesadas pueden llevarlo a cabo en casa para complementar, de esta forma, el trabajo docente. Todo lo que leeréis en este manual se puede llevar a cabo en casa sin ninguna dificultad. Para desarrollar este método lo único importante es vigilar las edades cronológicas para realizar los ejercicios correspondientes en nuestras casas. Las actividades que facilita esta obra, aunque son las mismas que usan los profesores, pueden ser realizadas de igual modo por los padres y madres. Este libro es también un extraordinario refuerzo a las familias con alumnos que presentan un ritmo más desajustado en el desarrollo de la lectoescritura.
El libro presenta una secuenciación de las actividades por trimestres desde los tres años hasta los primeros años de Primaria. Si deseamos estimular a nuestro hijo, solo debemos continuar las orientaciones y la secuencia propuesta en sus hojas. El hecho de que en el centro de nuestros hijos no utilicen metodologías parecidas no es impedimento para realizarlas en nuestras casas. De hecho, la mayor parte de las mismas, son rápidos juegos y actividades que no interfieren ni contradicen los otros aprendizajes.
Un método respetuoso y eficaz que nos ayudará con la primera enseñanza de la lectoescritura y la ortografía
