Mari dejó de hablar cuando su mamá murió. "Le comieron la lengua los ratones", decÃan sus hermanos. Su padre no sabe muy bien cómo actuar y decide enviarla con sus tÃos.El cambio le vendrÃa bien. "Cada quién es dueño de su voz. Hablará cuando quiera" DecÃa su tÃo Juan.Y Mari buscó en el fondo de su corazón y fue encontrando palabras. Primero una, luego otra...