Toda filosofÃa del Derecho forma parte de una determinada filosofÃa general, puesto que ofrece reflexiones filosóficas acerca de los fundamentos generales del derecho. Estas reflexiones pueden derivar de una posición filosófica existente, o pueden llevar a una posición de esta clase. Es caracterÃstico de la historia de la filosofÃa del Derecho que los filósofos se hayan inclinado por el primero de estos métodos, y abogados y juristas por el segundo. No obstante, no toda filosofÃa conduce a una filosofÃa del Derecho. El Derecho común, tradicional en gran parte, descansa en una visión general de la ley. Incuestionablemente, se puede ser un buen abogado o jurista sin tener clara noción de nuestra filosofÃa jurÃdica, asà como es verdad que se puede ser un buen filósofo sin haber elaborado una filosofÃa del Derecho. Tampoco la filosofÃa puede declararse ajena a la filosofÃa del derecho y la circunstancia de que tal o cual filósofo no elabore una filosofÃa del Derecho no impide que otros se dediquen a dar forma a esta filosofÃa